Hace alrededor de 20 años atrás, Liliana Guzmán Villavicencio, sufrió una grave enfermedad renal que la mantuvo hospitalizada por muchos meses, al ser dada de alta del recinto asistencial, volvió a la novena región donde residía en ese tiempo e inició un tratamiento con una Machi.

“Ella empezó a enseñarme sobre las hierbas, para que servía cada una, sus propiedades medicinales y me hizo un tratamiento con las hierbas adecuadas para mi dolencia, fue tan certera con ese tratamiento que nunca más volví a caer a un hospital”, cuenta emocionada Liliana.

“Fue entonces cuando decidí estudiar y saqué mi enseñanza media en una escuela mapuche, ahí estudié medicina herbaria con atención de enfermos. De esa forma nació HERBAS, mi emprendimiento”.

Posteriormente; “Mi hija se casó y ahí yo volví a Coya, yo pensé que mi emprendimiento llegaba hasta ahí no más, pero cuando llegué acá en la municipalidad me dieron la oportunidad, a la semana ya pertenecía a INDAP- PRODESAL, a los seis meses tenía mis invernaderos, traje mis hierbas del sur, recolectaba aquí en la cordillera, lo que tenía yo en mi casa y hasta el día de hoy he ido avanzando yo creo que a pasos agigantados, me ha ido muy bien, soy reconocida por la gente, porque los medicamentos les hacen muy bien. Además como soy productora de hierbas medicinales, yo vendo súper barato y alguna vez he hecho tratamientos sin costo a personas que no tienen para costearlos, porque es como devolver la mano de lo que me pasó a mí”.

Esta emprendedora, creadora de HERBAS, con una tremenda capacidad de resiliencia, supo doblegar la adversidad;  “yo creo que hubiese podido tomar mi enfermedad a mal, pero la tomé por el lado bueno, por el lado positivo y lo aproveché, hoy tengo la posibilidad de ayudar a otras personas con mi emprendimiento, es una medicina que no se demora poco tiempo en sanar pero es segura y no te hace daño”.

Y HERBAS se ha convertido en un emprendimiento familiar; “yo trabajo con mi esposo, cuando hay mucho trabajo me ayuda mi hija, incluso mi nieta que tiene cinco años, espero que ella pueda seguir con esto porque es muy bonito”.

Liliana se ha preocupado de seguir perfeccionándose, constantemente asiste a charlas, conferencias, cursos de capacitación, así como también de comercializar sus productos en las diferentes ferias, exposiciones y fiestas costumbristas en la región y a lo largo del Pais.

Hierbas medicinales, productos naturales orgánicos, gotas medicinales, shampoos, jabones, cremas, pomadas, jarabes para todo tipo de enfermedades entre otros productos, es lo que ofrece Liliana, quién recomienda a los nuevos emprendedores, “ser muy perseverantes, tener paciencia y saber buscarle el lado positivo a cualquier contratiempo”.

Así nos despedimos de Liliana, no sin antes dejar la invitación, “Yo vivo en Coya en la población Bellavista, calle Los Aromos 116, ahí tengo mi invernadero, también estoy en  una ruta de turismo rural, me pueden ir a visitar, estoy en la oficina de turismo de Coya  “mi número de contacto 90006098 y mi correo liliana2006@hotmail.com”.

Print Friendly