Iniciativa que es producto del trabajo entre la SEREMI de Minería de la Región de O’Higgins, la Universidad Adolfo Ibáñez y la Asociación de Pequeños Mineros de la VI Región, ASOMIN. Es la primera en su tipo a nivel nacional y su materialización es posible gracias a los aportes del Estado, a través del Consejo Regional de O’Higgins.
La Escuela Mina Planta es un proyecto emblemático que responde a la sentida necesidad de los alumnos, que cursan carreras mineras, de contar con un espacio, técnicamente adecuado, para realizar sus prácticas de formación.
Acogida por la SEREMI de Minería, la demanda se convirtió en un proyecto que ejecuta, técnicamente, la Universidad Adolfo Ibáñez, gracias a los recursos entregados por el Consejo Regional, vía el Fondo de Innovación para la Competitividad, FIC y a los aportes que realizó la ASOMIN, Agrupación que entregó en comodato –a 25 años- su sede social y terrenos, donde se emplaza la Escuela, Mina, Planta.
Como señaló el Intendente Regional, Pablo Silva Amaya, en la ceremonia de inauguración en Chancón, este es un proyecto esencial para la educación de la Región de O’Higgins, iniciativa que hoy ya tiene como beneficiarios a los alumnos de carreras mineras de los liceos técnicos: Francisco Antonio Encina Armanet de Las Cabras, Ernesto Pinto Lagarrigue; Presidente Pedro Aguirre Cerda, Instituto Tecnológico Minero Bernardo O’Higgins y Liceo Machalí, de Rancagua y Machalí, respectivamente.
“Me parece un muy buen proyecto donde alumnos no solo de Rancagua, sino de Machalí, Las Cabras y de una Universidad de Santiago van a venir a realizar sus prácticas y ver en terreno cómo se realizan las labores en una mina. Esta es una iniciativa muy importante para nuestra región por cuanto somos una zona minera y sobre todo que viene a dar un respaldo a la pequeña minería”, señaló la máxima autoridad regional.
A sus palabras se sumó el Decano de la Facultad de Ingeniería y Ciencias de la Universidad Adolfo Ibáñez, Alejandro Jadresic Marinovic, quien habló de la decisión de esta casa de estudios de ser parte de esta iniciativa, que también beneficiará los alumnos de ingeniería civil en minería.
“Este proyecto surgió de una conversación con el Gobierno Regional y con los empresarios locales de poder hacer una iniciativa en conjunto para ir preparando a los mineros del futuro y del Siglo XXI que permitan incorporar mayores tecnologías mineras, que usen altos estándares de seguridad y que protejan el medioambiente”, acotó el decano.
En un entorno campestre, en Chancón, se emplaza el proyecto que tiene un costo total de $700.000.000, de los cuales $200.000.000, ya fueron financiados vía FIC, permitiendo que asistan, semanalmente, más de 120 estudiantes, los que cuentan con clases de académicos de la Universidad Adolfo Ibáñez, liderados por el profesor Miguel Herrera Marchant.
Esta nueva forma de enseñar minería in situ, combina la teoría del aula con la práctica y el laboratorio. A la experiencia, se refirió el estudiante del Liceo Técnico Francisco Antonio Encina Armanet de Las Cabras, Washington Plaza, quien precisó que “participar de este proyecto ha sido una experiencia que nos ha permitido desarrollarnos como personas y nos ha dado la oportunidad de comunicarnos con diferentes autoridades como el Intendente y la SEREMI de Minería. Además yo voy hacer el primer profesional de mi familia”.
“El proyecto es un sueño que se materializa y que responde –sostuvo la SEREMI de Minería, Leonor Día Salas,- gracias a un trabajo constante de la Secretaría Regional Ministerial con distintos actores tan importantes como el Consejo Regional, la Universidad Adolfo Ibáñez, la Asociación Gremial de Pequeños Mineros, y los colegios técnicos, que creyeron en esta iniciativa que marcará un precedente en la formación del capital humano, en la Región y el país, tal como nos lo ha encargado la Presidenta Michelle Bachelet. Aquí se forman los futuros mineros y mineras, que mañana, sin duda, serán los protagonistas de la pequeña, mediana y gran minería del país”.
Por su parte, el Presidente de ASOMIN, José Parra Álvarez, habló del significado que tiene para los pequeños mineros que representa, apoyar esta iniciativa: “Estoy feliz porque este es un logro que quiero dejar como herencia de que los mineros chicos somos capaces de hacer algo. Esto marca un antes y después del desarrollo minero en la región, es un desarrollo a futuro”.
La significativa ceremonia concluyó con el tradicional corte de cinta e incluyó la entrega simbólica, a los pequeños mineros de Chancón, de 32 estanques para agua potable, que beneficiarán a los pequeños productores de oro, cobre y plata.
La iniciativa, fue financiada por el Programa de Capacitación y Transferencia Tecnológica para la Pequeña Minería Artesanal, PAMMA, del Ministerio Minería, gracias a la propuesta postulada por ASOMIN. El proyecto, implica no solo cumplir la normativa sanitaria vigente, sino que mejorar, ostensiblemente, la calidad de vida de los trabajadores de la pequeña minería, quienes contarán con agua potable en los campamentos mineros de Chancón.
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