En el marco del Día Mundial de la Obesidad, es importante destacar el daño que provoca y que contribuye a mayores posibilidades de enfermedades cardiovasculares, las que figuran entre las principales causas de muerte tanto en Chile como en el mundo.

En en relación a lo anterior, el Hospital de Lolol, comprometido con la prevención y promoción de la salud, cuenta con un gimnasio que entrega la posibilidad a los usuarios del establecimiento a realizar actividad física y disminuir los riesgos de sufrir un ataque al corazón.

Para conocer más respecto a esta iniciativa, conversamos con la kinesióloga del programa salud cardiovascular del módulo de actividad física, María Alejandra Pérez. “El módulo de actividad física busca disminuir los factores de riesgo a través del ejercicio, tiene una duración de cuatro meses y participan todos los usuarios que pertenecen al programa cardiovascular ya sea personas con hipertensión, diabetes, dislipidemia o que tengan algún factor de riesgo asociado como obesidad, sedentarismo o tabaquismo  y siempre que venga derivado de un médico o nutricionista”.

Al momento de nombrar los principales beneficios de participar de este módulo, Alejandra indica que “principalmente el disminuir los factores de riesgo cardiovascular, evitar tener una enfermedad o morir de un problema cardiovascular. El ejercicio está comprobado que disminuye todos esos factores de riesgo a través también de una alimentación saludable y el manejo de un tratamiento farmacológico”.

Respecto a si existe alguna edad en la que se puede presentar con mayor frecuencia las enfermedades cardiovasculares la kinesióloga aclara que “independiente de la edad, todos deben cuidarse, porque tengo pacientes que son súper jóvenes; que tienen sobrepeso, que son sedentarios o que fuman y pacientes, ya de 78 años, que también tienen algún factor de riesgo cardiovascular. Entonces las edades son múltiples en relación a la práctica del ejercicio, pero si esta diferenciado para cada una de las personas”.

Al ser consultada respecto a qué consejos entregaría a la comunidad para evitar enfermedades cardiovasculares, indica que “se debe comenzar con actividad física progresiva, un ejercicio físico súper simple, muy beneficioso y de un costo bajo es salir a caminar, hacer caminatas treinta minutos de manera diaria a una velocidad constante, fortalece la musculatura, tendones, articulaciones, mejora la circulación, también el bienestar físico y el emocional que es muy importante”.

Asimismo, la funcionaria del Hospital señala que se debe “asistir a los controles médicos, de crónicos, ahí se puede plantear la idea de participar en el módulo de actividad física, al asistir a estos se adhieren de manera importante, no es sólo venir y hace ejercicios sino que además abarca beneficios a nivel emocional, salud mental, comparten experiencias con otras personas teniendo un beneficio integral”.

Nancy Romero y Viviana Correa son dos usuarias que participan desde hace un tiempo en el módulo de educación física y ambas coinciden en que la experiencia ha sido muy buena. “Es una hora y se pasa súper rápido, yo recomiendo que vengan, que participen porque hace bien para la salud”, destaca Viviana. Asimismo, Nancy valora los beneficios recibidos gracias a la actividad física exteriorizando que “La experiencia ha sido buena porque a uno le ayuda y he podido bajar de peso. Siempre pasaba con dolor de columna pero gracias a los ejercicios me he sentido muy bien”

El gimnasio del Hospital de Lolol funciona de lunes a viernes, desde las nueve de la mañana hasta el mediodía y el grupo de la tarde desde las tres hasta las cinco de la tarde.

 

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