Compartimos con ustedes, entrevista al Subgerente de Asuntos Públicos De Minera Valle Central, realizada por nuestro medio asociado Poder y Liderazgo.
Con más de 25 años de experiencia en comunicaciones empresariales y ONG, el Subgerente de Asuntos Públicos de Minera Valle Central (MVC), Eugenio Espinosa, ha desarrollado un amplio trabajo en la empresa desde el año pasado, cuando asumió el desafío de liderar las comunicaciones internas y externas de la minera, aplicando toda su trayectoria en fundraising, marketing social y gestión de equipos
En entrevista exclusiva con Poder y Liderazgo, este relacionador público de la Universidad del Pacífico, con diplomado en comunicación corporativa y magister en comunicación social, entre otros estudios que ha compatibilizado también con la docencia, abordó los principales ejes del trabajo en torno a la sustentabilidad y la relación con la comunidad, que ha sido un sello característico de la minera.
“Operamos en una sociedad con acceso a información, que espera que las instituciones y empresas seamos transparentes. En Minera Valle Central compartimos esa visión y nos esforzamos por hacerla realidad en cada decisión que tomamos. Nos dimos cuenta que la forma de hacer minería cambió, que lo que conocemos en el rubro es el ahora, el desde y la mirada sustentable a nivel global es uno de los elementos diferenciadores que cobran valor con nuestros públicos de interés”, resalta el ejecutivo minero al inicio de la entrevista.
¿Qué alcance y significado tiene el concepto de sustentabilidad para Minera Valle Central?
“La sustentabilidad está en todo lo que hacemos; en la relación con nuestros trabajadores, en los vínculos con la comunidad, en nuestro trato con el medioambiente y, ciertamente, en todas nuestras decisiones económicas. Nosotros “invertimos”, no “gastamos”, pues nos parece que la única forma de tener una operación viable y equitativa en el largo plazo es teniendo esa mentalidad”.
¿Cuáles son los principales focos de trabajo de la compañía en materia de sustentabilidad?
“Tres son los ejes que engloban nuestros fines y que contribuyen al desarrollo sustentable de nuestra organización: medio ambiente, economía y sociedad.
- Sustentabilidad ambiental: Procuramos siempre el uso eficiente y racional de los recursos naturales. Esto quiere decir que operamos teniendo en cuenta los límites de renovación de los recursos, los ciclos de la naturaleza y, la visión de mantener un equilibrio entre el hombre y el medioambiente.
- Sustentabilidad económica: Ciertamente nos interesa crecer y desarrollarnos como empresa, pero sabemos que no podemos hacerlo descuidando el impacto social y el cuidado ambiental.
- Sustentabilidad Social: Procuramos mantener una actitud socialmente responsable. Para ello, garantizamos espacios laborales dignos y estables: promovemos la colectividad entre las personas y las comunidades; llevamos a cabo talleres y proyectos de educación, capacitación y concientización; mantenemos un compromiso con el desarrollo territorial de las comunidades, facilitando puntos de encuentro que fomenten la educación y la cultura”.
¿Cómo evalúas la relación que ha establecido MVC con sus diversos grupos de interés, especialmente a nivel de comunidad y actores sociales?
“Más que hacer una evaluación, diría que la relación que tenemos con nuestros distintos grupos de interés, especialmente a nivel de comunidad, es franca, directa, cercana y transparente. Somos un vecino más”.
“Tratamos de involucrarnos en lo que piensan, sienten y necesitan. Nos preocupa lo que pasa con ellos… Espero que ellos lo sientan así”.
¿Qué acciones concretas está impulsando actualmente la empresa con miras a fortalecer la vinculación y nexos de trabajo con la comunidad?
“Nos interesa que los vecinos sean protagonistas de sus propios cambios. Por lo mismo, permanentemente nos reunimos con las juntas de vecinos de nuestra área de interés y les preguntamos qué quieren, qué necesitan, qué les preocupa y qué los motiva”.
“En el último periodo del año 2018 y principios del 2019 trabajamos con las comunidades en la elaboración de un diagnóstico de la realidad local, de ese diagnóstico participativo definimos que nuestro foco iba a estar en los niños y en los adultos mayores”.
“Si bien nuestro ámbito de influencia es Requinoa y El Olivar, nuestro trabajo más intenso es con las juntas de vecinos de Gultro, localidad que pertenece a la comuna de El Olivar. Apoyamos también a los niños de la Escuela Municipal de Gultro y permanentemente estamos colaborando en actividades solidarias de distintas juntas de vecinos. Además, como compañía tenemos un programa que se encarga de producir charlas y talleres para las comunidades, desde nuestras diferentes competencias: alfabetización digital, finanzas personales, prevención domiciliaria, entre otros”.
“Con nuestro voluntariado, llamado Granito de Arena, realizamos actividades de acompañamiento y entretención a los niños de la Fundación Somos Down y a las niñas de María Ayuda, en Rancagua”.
“En El Olivar y Requínoa entregamos becas sociales, en áreas de salud, capacitación y empleabilidad. Este año abriremos cursos de capacitación en cuidado de adultos mayores y gestionaremos talleres de desarrollo personal, a través del teatro, a los adultos mayores de Requínoa”.
“También hacemos radio. Todos los miércoles, de 12 a 13 horas, tenemos un espacio en la radio comunitaria El Olivar que produce y conduce el área de comunicaciones de MVC. Es un espacio en el que abordamos diversos temas, como equidad de género y la introducción de la mujer en la industria minera, prevención, cultura, voluntariado, nuestras raíces, grumming (acoso digital), entre otros, que son de mucha utilidad para los vecinos. En todos los programas llevamos un invitado especial y lo entrevistamos. Ya llevamos más de 20 programas”.
¿De qué forma la empresa enfrenta los diversos cuestionamientos y mitos en torno al tratamiento de los relaves?
“Con educación. A través de charlas, difusión en medios y conversaciones uno a uno, buscamos desmitificar la componente negativa de los pasivos mineros”.
“Nos interesa que todos entiendan que detrás de los relaves (pasivos mineros) hay una tremenda oportunidad. Tratarlos es beneficioso para el dueño del recurso, porque se obtiene más mineral; para las comunidades, porque disminuye los riesgos de inseguridad a los que están expuestos, sobre todo los precordilleranos y, para el medioambiente, porque permite disminuir los residuos a través de la reutilización”.
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