La Jefa de Estado junto al Ministro de Energía, Andrés Rebolledo participaron en la puesta en operaciones del nuevo Sistema Eléctrico Nacional, luego de concluidas las obras para la Interconexión de los Sistemas Interconectados Central (SIC) y del Norte Grande (SING). La estructura abastecerá de energía al 97% de la población del país.
La estructura se extiende por 3.100 km desde Arica a Chiloé, abasteciendo de electricidad a más del 97% de la población nacional. Tendrá una capacidad instalada aproximada de 24.000 MW y una demanda de 11.000 MW, representando el 99% de la capacidad instalada de generación del país. Es el resultado de la Interconexión de los Sistemas Interconectados Central (SIC) y del Norte Grande (SING).
Las obras comenzaron su construcción en agosto 2015, con una inversión sobre US$ 700 millones. Hasta la fecha, en Chile había dos grandes sistemas interconectados: el SING (Arica a Antofagasta) y el SIC (Taltal hasta la isla grande Chiloé). A estos se suman el Sistema Eléctrico de Aysén y el de Magallanes. La interconexión fue impulsada por años, para aportar seguridad al sistema y disminuir los precios de la tarifa eléctrica.
La SEREMI de Energía, Alicia Barrera, señaló que “El objetivo de una expansión en transmisión es, ante todo, asegurar que existirá suficiente capacidad en las líneas para abastecer la demanda eléctrica a partir de la generación que se desarrolle, de manera confiable y al menor costo posible”.
Asimismo, la SEREMI de Energía, señaló que “Uno de los principales resultados que llevaron a iniciar esta obra, fue que la interconexión entre los sistemas SIC y SING genera beneficios relevantes en precios de contratos regulados, tanto por una menor concentración de la oferta (mayor competencia) como por una disminución en el riesgo de contratación”.
Es importante destacar que la interconexión entre SIC y SING es un megaproyecto, que demandó inversiones por sobre los US$ 860 millones y la construcción de una línea de 600 kilómetros de largo. Es un proyecto de última tecnología. Este proyecto reforzará la seguridad energética del país y permitirá que en el futuro el intercambio de energía con Argentina y Perú en ambos sentidos, por ejemplo, se haga de forma más expedita.
La línea de transmisión está terminada y en fase de prueba de los equipos y energización de las líneas de transmisión. En el tendido se instalaron aproximadamente 1.350 torres.
La principal importancia de esta línea es que le dará mayor seguridad al sistema eléctrico chileno y además permitirá traer desde el norte hacia los centros de consumo gran parte de la energía renovable no convencional, principalmente de las plantas solares, que se produce en el desierto de Atacama.
Comments