El establecimiento pertenece a la congregación Pequeña Obra de la Divina Providencia y se ubica al interior del Pequeño Cottolengo, de Rancagua.

Un mes lleno de actividades y presentaciones fue inaugurado por la comunidad educativa de la Escuela Especial Fray Ave María, perteneciente a la obra Pequeña Obra de la Divina Providencia e instalada en la residencia del Pequeño Cottolengo, en Rancagua.

Un esquinazo preparado por los profesores del establecimiento educacional, más la presentación de un baile nortino junto a los alumnos, fue la forma en que dieron el vamos a una serie de actividades que se realizarán durante septiembre.

Al respecto, una de las profesoras de la escuela, Virna Reyes, explicó el calendario de actividades: “Todos los años hacemos un esquinazo para inaugurar el mes junto a la institución, con un corte de cinta, chicha en cacho, el himno nacional folclórico del Bafona y los bailes preparados con los niños, además del esquinazo por parte de algunos profesores y equipo multiprofesional. Invitamos a toda la comunidad, apoderados y familiares”, indicó la profesora.

“Se continúa con un acto que este año se llamará “Chile celebra el mes de la patria junto a los inmigrantes”, donde se invitó a un grupo que se presentará con bailes tradicionales, cerrando el mes con un día de juegos típicos criollos en que, como en oportunidades anteriores, desde la granja Betania han traído un lechón para que los niños jueguen a pillarlo. Ese día cada curso tendrá sus stands con juegos típicos como en las fondas”, concluyó.

La directora regional del SENAME O’Higgins, Jessika Espina, fue testigo de la participación de los niños y niñas de la residencia en la inauguración. “Agradecemos la invitación a esta linda ceremonia, donde se palpó la inclusión y la atención integral que realizan a diario los profesionales de la escuela y de laPequeña Obra de la Divina Providencia del Pequeño Cottolengo”.

Print Friendly