La implementación de la metodología C+ ha introducido mejoras en procesos como el inicio de turno con excelentes resultados. La experiencia en el sector Esmeralda ha sido tan auspiciosa, que este año esperan cumplir con la meta de producir 42 mil toneladas por día.
Mejorar el rendimiento en el inicio de los turnos es una de los palancas que estableció la jefatura de la Mina Esmeralda de El Teniente, en conjunto con los agentes de cambio del C+, como pilar para lograr la aspiración de alcanzar una producción de 42.000 toneladas diarias a mayo de 2017.
Desde que esta metodología de excelencia operacional llegó oficialmente al área el 7 de diciembre, se profundizó la estrategia que ya se estaba implementando para reinsertarla como un sector productivo importante para la División.
“En enero nos reunimos con los jefes de turno y establecimos con ellos los estándares para cuatro de las palancas principales para el año que son inicio de turno, relevos, fin de turno y traslape. Nos enfocamos en el inicio de turno y gracias a una idea surgida de los propios trabajadores tuvimos buenos resultados: nos pusimos como meta 80 baldadas dentro de la primera hora y ya estamos en 75”, resaltó Eduardo Viera, jefe Proceso Extracción de Esmeralda.
Entre las medidas adoptadas se definieron personas con liderazgo dentro de los cuatro grupos que llevan adelante el proceso, para encabezar el inicio eficiente del turno y motivar al resto del equipo a hacer lo mismo.
Además, se puso énfasis en la información que cada turno entrega al venidero para definir las mejores calles de producción y aportar así a la efectividad de la primera baldada.
“La evaluación a la fecha es positiva. En febrero tuvimos un buen inicio porque llevamos casi 39 mil toneladas promedio, cuando en 2016 el mejor rendimiento que tuvimos fue de 37 mil y fracción, mientras que el promedio del año pasado fue 34.500. Consolidar estos resultados en el inicio de turno y llevarlo a las palancas restantes -martillo picando y pique lleno- será clave para llegar a las 42 mil toneladas”, señaló Eduardo Viera.
Pablo Alvarado, agente de cambio del C+, destacó que el avance que muestra el área responde “al apoyo de toda la línea operativa, desde los operadores y jefes de turno hasta el gerente de Minas”. Además agregó que “es fundamental difundir estas palancas para así impulsar el aumento productivo de Esmeralda”.
La importancia de la comunicación
La presencia de los agentes de cambio del C+ ha permitido mejorar los diálogos de desempeño, que actualmente se desarrollan entre jefe de proceso y jefe de turno, jefe de unidad y jefes de proceso, jefe de unidad con superintendente y superintendentes con el gerente de Minas.
El siguiente paso es que el diálogo se materialice con jefes de turno y sus operadores, para ver los indicadores en los tableros, analizar rendimientos y tomar las acciones correspondientes para mejorar los indicadores en rojo.
“Lo importante es la comunicación”, señala Anthonny Witt, jefe de turno. “Contamos con indicadores grupales por día, que permiten una comparación y traspaso de información y de mejores prácticas. Así el trabajador ve cómo lo está haciendo, cómo están sus compañeros de los otros grupos y todos se van motivando para obtener mejores resultados. Creo que es una muy buena práctica que el operador sepa cómo le está yendo”, agregó.
“Hemos visto un cambio en la gente, en la forma de trabajo, en la interacción entre jefes de turno. La proyección es que vamos rumbo a conseguir la aspiración productiva”, estima Witt.
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