El curso está dirigido a Educadores de Trato Directo en residencias de Rancagua, iniciándose prontamente otro para Rengo y Quinta de Tilcoco.

El Servicio Nacional de Menores (SENAME) O’Higgins, en coordinación con el Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (SENCE), dio inicio al primer curso del programa Becas Laborales dirigido a Educadores de Trato Directo en residencias, cuyo objetivo es otorgar las competencias técnicas y reforzar la calidad de atención a través de las temáticas de infancia que se abordarán.

El primer curso de 15 cupos se impartirá en dependencias de la residencia del Pequeño Cottolengo de Rancagua, el cual constará de 120 horas y será impartido los días lunes, miércoles y viernes en horario matutino.

Al respecto, la directora regional del SENAME, Jessika Espina, agradeció al director regional del SENCE, Cristian Pavez, por la pronta respuesta a la necesidad de capacitación. “Primero que todo debo felicitar a quienes comienzan este curso, por su compromiso y disponibilidad a querer certificar sus competencias. Además, quiero destacar el apoyo brindado desde un principio del SENCE, porque esta es la respuesta a una gestión intersectorial que va en beneficio de nuestros niños y adolescentes que se encuentran en el sistema residencial”.

Asimismo, agregó que “esta capacitación es la primera de varias, ya que la idea es que todas las educadoras pasen por este curso, el cual estamos gestionando para que el próximo año tenga un segundo módulo, el cual permita profundizar aún más las temáticas tratadas en este que recién comienza”.

Por su parte, el director del SENCE manifestó que “por primera vez estamos trabajando con el SENAME y sus educadoras de trato directo en cursos de capacitación, los que les permitan adquirir las competencias para seguir desarrollando de la mejor manera su labor”.

“Las conversaciones se iniciaron a principio de año y hoy podemos decir con orgullo que estamos partiendo; esperamos continuar con este tipo de iniciativas que, a través de nuestro programa de Becas Laborales, permita que las trabajadoras de los organismos colaboradores y de los centros de administración directa puedan capacitarse por el importante trabajo y función que realizan”, concluyó Cristian Pavez.

Felipe Carrillo trabaja en el Pequeño Cottolengo y señala que “es una muy buena oportunidad, ya que esta capacitación nos permitirá hacer mucho mejor nuestro trabajo y crecer como profesionales”.

Por su parte, la educadora de trato directo que ejerce funciones en la residencia del organismo colaborador de la Asociación Cristiana de Jóvenes (ACJ) de Rancagua, Vilma Escobar, expresó que la capacitación es “importante, porque viéndolo con las demás personas que haremos el curso, podremos mejorar nuestras debilidades y retroalimentarnos con la experiencia que tenemos cada una”.

 

 

 

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